Editorial

Fotografía de Fernando Galindo

EL AGOSTO EN CIEZA

El calor en las calles ciezanas es soporífero, en ocasiones insoportable. Estamos inmersos e inmersas en pleno mes de agosto. Muchos de nuestros conciudadanos y conciudadanas han “emigrado” de vacaciones a zonas donde la temperatura es más liviana y otros muchos y muchas se han refugiado en nuestros fértiles campos para remojarse en las piscinas y soportar, de la mejor manera posible, la enésima ola de calor de este verano.

Sin embargo, agosto, es el mes por excelencia en Cieza. Bueno, queremos decir la última semana de agosto, pues ya está a punto de llegar la semana más grande para miles de ciezanos y ciezanas. Se aproxima nuestra querida Feria y Fiestas de Cieza, donde se rinde homenaje a san Bartolomé, patrón de la localidad y donde se prevé que las calles ciezanas entren en ebullición, pero en esta ocasión de color.

El preludio de la misma será la XXXII Semana de Cine Mágiko, que se ha convertido en un habitual evento cultural de Cieza y que servirá para palpar sensaciones. Posteriormente será el turno del XXXIII Festival Internacional de Folklore en el Segura. Y de esta forma llegaremos al inicio de nuestra añorada Feria y Fiestas de Cieza.

Esperamos que la feria avive nuestras sensaciones y sea capaz de sacarnos del letargo soporífero de agosto, que incluso se ha apoderado de la vida política del municipio. A principios de este tórrido mes de agosto se celebró el Pleno municipal de la nueva corporación, demostrando que sigue la misma tónica bronca en el ámbito político local. Escuchar al Gobierno local y a la oposición hablar sobre un mismo tema político es como oír una misma canción interpretada con ritmos musicales totalmente distintos; al final, la canción original es irreconocible. ¿Cómo puede cambiar tanto la visión sobre un mismo asunto en concreto? La realidad es que viven en las antípodas y sus discursos están plagados de reproches mutuos. Parece que nada de lo que haga un bando será bien visto nunca por el otro, lo cual indica que deben mejorar el discurso político, y mucho. Aunque nos queda la ilusión de que esta feria que se aproxima sea capaz de evadirnos de los problemas mundanos, aunque solo sea por una semana. Ojalá sea así.