Todas las semanas nuestros lectores y lectoras pueden disfrutar de la sección La mirada de Tete Lucas, donde el célebre fotógrafo local lleva a cabo un análisis de las mejores fotografías que ha realizado de la localidad
Tete Lukas
Hace unos días fui con unos amigos a darnos un baño en el Gorgotón, pero cuando llegamos y vimos el panorama, sin pensarlo dos veces, nos dimos la vuelta y buscamos un sitio, más ‘abajico’, en el río donde mojarnos los pinreles.
Entre 10 y 12 personas yacían en el manantial, inmóviles, sumergidos hasta el cuello y mirándose los caretos. La escena me recordó a la de los macacos japoneses que se bañan en las aguas termales del Parque Nacional de Joshin’etsukogen. La única diferencia entre los macacos de Japón y los primates del Gorgotón es que los primeros no dejan señal alguna tras su paso, mientras los segundos dejan un rastro de basura y destrucción.
Aunque esto no es nada nuevo, en los últimos años la irrupción de las redes sociales en nuestras vidas está contribuyendo, aún más, a este problema, debido a la masificación del turismo. Además, a mi parecer, aparte del evidente riesgo ecológico, esta masificación ha generado otro problema como es la pérdida del encanto original de lugares que hasta ahora eran más o menos desconocidos. Pepe Roldan lo explica así en su blog: “Destinos impresionantes, que alguna vez fueron conocidos solo por unos pocos afortunados, ahora se vuelven populares y, en ocasiones, pierden su encanto único debido a la exposición masiva a través de plataformas como Instagram y TikTok. Los rincones magníficos secretos poseen un atractivo especial debido a su carácter inexplorado y exclusivo. Son lugares que despiertan nuestra curiosidad y nos brindan una sensación de descubrimiento personal. Estos destinos, ya sea una playa remota, una cascada escondida en medio del bosque o un pueblo pintoresco tienen una magia que solo se puede experimentar cuando se mantienen alejados de las multitudes.
Las redes sociales, especialmente Instagram y TikTok, han revolucionado la forma en que compartimos nuestras experiencias y descubrimos nuevos destinos. Las imágenes y los videos se vuelven virales en cuestión de horas, lo que lleva a una avalancha de visitantes en busca del lugar destacado. Los hashtags y las ubicaciones geográficas se convierten en señuelos digitales, atrayendo a las masas y erosionando el carácter secreto y exclusivo de estos rincones”.
Internet está lleno de publicaciones como las siguientes: “20 rincones secretos de la Región de Murcia”, “Los rincones de Murcia que te dejaran sin aliento”, “Lugares secretos para perderse en la Región de Murcia”, pero este, sin duda, es el que más me ha gustado: “Lugares instagrameables de la Región de Murcia”. La paradoja es evidente ya que cualquier lugar deja de ser secreto una vez que se publica en redes sociales.
Cieza es un lugar con muchos rinconcicos naturales maravillosos donde tiktokers e instagramers todavía no han llegado, ni lo harán, si no les decimos donde están. Al fin y al cabo no son más que urbanitas que no saben ir a ningún sitio si no les mandas la ubicación a su dispositivo de última generación.
Guarda esos lugares para ti, para tu disfrute sensorial y emocional, y para que sus habitantes naturales no se sientan aún más amenazados.
Paz, amor y decrecimiento.