En un comunicado de prensa, el concejal de IU-Verdes y titular de Servicios e Infraestructuras compara «la situación en la que se encontró esta zona y la que ofrece actualmente»
Crónicas de Siyâsa/Concejalía de Servicios e Infraestructuras
«Hace dos años, el Paseo ribereño de Cieza padecía un deterioro y abandono total, con muros de mampostería derruidos, las cañas invadiendo las zonas de paseo y los parterres plagados de malas hierbas con más de un metro de altura. Esto fue lo que se encontró el nuevo responsable de esta infraestructura, el concejal de IU-Verdes, Francisco Saorín, que inmediatamente contrató a una empresa para reparar los desperfectos y adecentar el mismo», sostienen fuentes de la Concejalía.
En un comunicado de prensa y haciendo un repaso de lo ocurrido en estos dos años, el edil recuerda que en octubre de 2015 comenzaron los trabajos para la ampliación del mismo acabándose en febrero de 2016; «una controvertida obra por su enorme coste, casi cuatro millones de euros, y por la agresividad de la misma con enormes escolleras de piedra y pasarelas innecesarias, como la del puente de hierro, con gran impacto visual, que ha supuesto más la urbanización de una parte del río que su recuperación ambiental, ‘herencia’ del anterior gobierno, con la que nunca estuvimos de acuerdo en su configuración aunque sí en su necesidad, pero que no por ello hemos dejado de cuidar una vez acabada».
«En febrero de 2016 -continúa Saorín-, concluida la nueva obra segunda fase del paseo ribereño, tuve que comunicar a Acuamed y Tragsa, empresas encargadas de la ejecución de la misma, el mal estado de algunos de los muros levantados, los cuales empezaban a caerse recién terminada la obra, y llegada la primavera del 2016 tuve que comunicar a Tragsa la necesidad de reponer toda la planta que no había prosperado».
Asimismo, «desde marzo del 2016 a diciembre del mismo año, es Aguas de Cieza quien aborda la limpieza de todo el Paseo ribereño, colocación y limpieza de papeleras y zonas de paso, reparación, hasta en cuatro ocasiones, de las fuentes del puente de hierro y del puente del Argaz, reposición de papeleras rotas y reposición de bancos y mesas de la zona de la Era, una constante por actos de bandalismo».
Por otra parte, «al inicio del 2017, desde la Concejalía de Servicios, se mejoró la zona del puente del Argaz con la colocación de bancos, juegos y aparatos deportivos y colocación de de estos últimos en el Jardín del arenal, actuación ésta última que lleva a cabo la Concejalía de Deportes», afirma el concejal.
«Todo se ha hecho con medios propios, por lo que me he visto obligado a pedir colaboración a la Concejalía de Empleo, para que a través de los Consejos Comarcales y con los contratados a partir del Programa de Empleo Social, se mantuvieran a raya las malas hierbas, la invasión de cañas y el cuidado de la zona», subraya Saorín, «reparándose asimismo las zonas de paseo levantadas por las raíces de los árboles, zonas conflictivas por las caídas de las personas que paseaban».
El concejal, informa que una vez repuesta la planta que no había agarrado, se ha contratado con empresa externa el mantenimiento de la zona con lo que actualmente se están llevando a cabo tareas tales como «varios riegos de las plantaciones, revisión de arbolado y poda de ramas que presentan riesgo de caída, siega y desbroce de caña en bordes de las sendas para impedir que se vean invadidas y en las zonas de parques y playas fluviales, limpieza de la zona de la desembocadura de ‘El Cauce’, desbroce y retirada de restos de los parterres y de los bordes de calzada, lo que ha supuesto que el aspecto y la situación del Paseo ribereño de Cieza diste mucho de la que me encontré cuando, hace dos años, asumí la responsabilidad del cuidado del mismo», precisa Saorín.
Finalmente, el primer teniente de alcalde informa en el comunicado de que «la última actuación llevada consiste en la puesta en marcha de un proceso de licitación abierto para llevar a cabo el mantenimiento de la zona de manera permanente y a lo largo de un año, proceso que se ha iniciado y que está valorado en torno a unos 100.000 euros; un esfuerzo más que importante por parte de todos los ciezanos».
