Por su parte, el edil de Empleo y Medio Ambiente, Antonio Moya, replica que los ecologistas no le han llamado para “conocer el proyecto que se va a llevar a cabo, que sí es sostenible y respetuoso con el entorno”
Javier Gómez
Los ecologistas ciezanos vuelven a chocar de frente con las políticas del Ayuntamiento de Cieza. El año pasado expresaron sus quejas por los episodios de quemas de restos agrícolas ya que, según ellos, “el humo producido empeoraba la salud de las personas enfermas y de aquellos que padecen asma”. Durante la pasada Feria de Cieza también censuraron al Consistorio “por permitir la entrada de menores a la corrida de toros, algo incongruente para una ciudad que se ha declarado ‘Amiga de la Infancia’”. Ahora, las protestas vienen motivadas por lo que aprecian “como erosión y degradación del suelo” en una zona tan emblemática en Cieza como es la Ermita del Santo Cristo del Consuelo, un espacio muy visitado debido a la veneración que se le tiene a la imagen religiosa en el municipio.
Las organizaciones ecologistas RioRie y Ecologistas en Acción de Cieza han censurado los trabajos que el Ayuntamiento de Cieza está realizando en zonas como la ladera de la Ermita, porque “erosionan y degradan gravemente los suelos sobre la que se está actuando”, subrayan fuentes consultadas por esta redacción.
Estos trabajos se están llevando a cabo por parte de los trabajadores contratados por los Consejos Comarcales, dependientes de la Concejalía de Empleo, y se están realizando en diversas zonas de la localidad con el objeto de acondicionarlas.
En este sentido, el concejal de Empleo y Medio Ambiente, Antonio Moya ha manifestado a esta redacción que los ecologistas no le han llamado para “conocer el proyecto que se va a llevar a cabo, que sí es sostenible y respetuoso con el entorno”.
Los ecologistas, lamentan que llevan años pidiendo al Consistorio que deje de realizar este tipo de actuaciones y matizan que “es un error invertir dinero y recursos en arrancar con azadas la escasa vegetación que crece en terrenos como estas laderas, y dejar suelos desnudos y cada vez más estériles».
En estas zonas, explican, «lo que se debe hacer es lo contrario. Es decir, consolidar y revegetar las pendientes para frenar su degradación». Sin embargo, “lo que se consigue con este tipo de acciones”, añaden, «es profundizar su erosión al eliminar la escasa vegetación que podría ayudar a retener su superficie ante la acción de agentes erosivos como la lluvia, entre otros».
Sin embargo, Moya no comprende las quejas de los ecologistas: “En esa zona en concreto habíamos plantado varias terrazas con plantas que han sido destruidas debido a actos vandálicos. Además, se está procediendo a replantar la ladera con vegetación autóctona, con pinos”, recalca el edil.
Por su parte, los ecologistas consideran que los trabajos de roza que realizan los trabajadores de los Consejos Comarcales “no tienen justificación alguna”, y apuntan que desde el Ayuntamiento de Cieza «se debería aprovechar los recursos municipales para intervenir con un poco de sentido común, plantando especies resistentes y adecuadas a este tipo de suelos, regenerando y mejorando la imagen de estas zonas, en lugar seguir erosionándolas cada vez más».
En contraposición, Antonio Moya ha expresado que la intención municipal consiste en asegurar el talud con vegetación y que no se quedará despoblada como aseguran los ecologistas. “Si me hubieran llamado les podría haber explicado todo el proyecto y nos habríamos ahorrado todo este malentendido, pero no lo hicieron”.
Finalmente, ambas organizaciones ecologistas reclaman al Ayuntamiento de Cieza que “rectifique y abandone este tipo de intervenciones”.