Los articulillos de Opinión de Antonio Balsalobre

En el camino

Sábado, 29 de marzo

El domingo pasado me desplacé de Cieza a Calasparra para asistir a una obra de teatro. Valió la pena. Calasparra también tiene una vidilla cultural que merece ser reconocida. Alquibla presentaba dentro de su “Trilogía del camino” su espectáculo No me falte el aire. Alquibla lleva formando parte del escenario teatral de la región, en su “devenir migrante”, más de cuarenta años, toda una vida, como aquel que dice. Me enteré del evento por la sección cultural de este periódico. Gracias también a los medios que informan sobre esa vidilla cultural, la de nuestro entorno más cercano. La obra es entretenida y profunda a un tiempo; nos divierte y nos hace reflexionar. Los actores, además, están estupendos. Encarnan personajes que, en el camino que es la vida, corren desesperadamente en busca de su identidad. Hijos y padres de siempre, enfrentándose a las cosas de siempre. Enhorabuena, Alquibla. Que ni a vosotros ni al teatro os falte nunca el aire.

A nadie extrañe

Lunes, 31 de marzo

Lo siento, pero no consigo imaginarme a Feijóo representando a España con soltura y eficacia ni por Europa ni por el resto del mundo. Si anda perdido y errante en su propio país, no digamos nada cómo sería por ahí fuera. Con todos los respetos, estoy convencido de que su hábitat natural ha sido Galicia —que sí cabía en su cabeza—, y que sacarlo de allí ha sido para el PP contraproducente. En cualquier caso, vamos a tener la ocasión de comprobar sus dotes internacionales muy pronto. En Valencia, sin ir más lejos, donde el Partido Popular Europeo celebrara su congreso a finales de abril. Una Comunidad antes considerada por Feijóo como referente de sus políticas, y que ahora, tras la nefasta gestión de la dana y los pactos anunciados con la extrema derecha, con Mazón a la cabeza, se ha convertido en un verdadero lastre. A nadie extrañe que para evitar un posible escenario hostil ni Feijóo ni su plana mayor acudan al evento internacional del que son los anfitriones.

“Murcia, región de mujeres”

Miércoles, 2 de marzo

En Cieza se cruzaron el pasado lunes dos caminos memorables. El transitado por unas trabajadoras, las “picaoras” de los mazos, que conduce a la memoria del esparto, una economía trascendental hasta mediados del siglo pasado para muchos pueblos murcianos; y ese otro de la enseñanza que llevó a la ciezana Francisca Moya del Baño a ser la primera mujer catedrática de la Universidad de Murcia. Paquita Moya tuvo que abrirse paso en un ámbito, el académico de entonces, predominantemente masculino. Su mérito es inmenso. Las mujeres y niñas del esparto, por su parte, como nos recordó María Cano, presidenta del Club Atalaya-Ateneo, que regenta el Museo del Esparto, donde se colocó una de las placas de reconocimiento, hubieron de enfrentarse, en unos tiempos durísimos, de miseria, a unas condiciones laborales adversas: “Muertas a trabajar, con el hambre que había entonces y el peligro de que en un descuido un mazo te chafara la mano”, dejó dicho una de ellas. Que esos dos itinerarios homenajeados, el del trabajo y la educación, no se vuelvan a separar nunca más.