Según diversos estudios serían el cerebro propiamente dicho, la flora bacteriana y la inteligencia de las bacterias
Toni Box
Las últimas investigaciones científicas afirman que el ser humano está compuestos por 3 cerebros: el cerebro, la flora bacteriana y la inteligencia de las bacterias. Se sabe a ciencia exacta que el ser humano es un ecosistema ya que alberga más bacterias que, incluso, neuronas.
La microbiótica contiene millones de bacterias que se comunican por medio de neurotransmisores con las neuronas presentes en la pared Intestinal. A día de hoy se sabe que la comunicación microbiótica – cerebro se produce a través del nervio vago. Se piensa que en el proceso de la evolución el primer cerebro en existir se encontraba en la microbiótica ya que los primeros seres de la evolución sólo se dedicaban a digerir la comida de la cual se alimentaban. Todavía no se sabe bien a ciencia exacta, pero con la evolución aparecía el segundo cerebro con el sistema nervioso central. El tercer cerebro nos acompaña desde en el momento en que nacemos ya que se produce una invasión bacteriana de manera progresiva.
¿Ahora, qué sabemos exactamente de la microbiótica?:
- Sabemos que tiene tanta neuronas como, por ejemplo, un perro, con lo cual es un sistema inteligente
- Dependiendo de su equilibrio puede o no aparecer o ser la fuente de números patologías psíquicas y fisiológicas como por ejemplo: ansiedad, depresión, Parkinson, fibromialgia, predisposición a la diabetes, obesidad, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, enfermedades autoinmunes, enfermedades cardiovasculares. Estas patologías aparecen por una mala comunicación entre la microbiótica y las neuronas del cerebro a través del nervio vago (todavía la ciencia tiene mucho trabajo para poder demostrarlo al 100%).
- Actúan de manera directa en las emociones. Se cree que probablemente el subconsciente pueda residir en la microbiótica.
- Sin estas bacterias moriríamos. Entre otras cosas porque son el medio de comunicación directa con el sistema inmunológico, avisando de posibles infecciones, etc.
- Cada persona tiene un tipo de bacterias distintas por lo que el aporte de probióticos de forma natural, o mediante suplementación, puede tener efectos diferentes en cada una de ellas.
- Un neurotransmisor tan importante como la seretonina se segrega en un 80% en la microbiótica.
¿Que lleva a un desajuste en la microbiótica que repercute en diversas patologías?
Principalmente el estrés, que se ve reflejado de manera muy intensa en el sistema digestivo, factores genéticos, estilo de vida que incluye la alimentación, el manejo del estrés y la actividad deportiva.
¿Qué herramientas tenemos para abordar el territorio intestinal y las patologías derivadas del mismo?
Terapias como la acupuntura abdominal, una nutrición personalizada, ciertas cepas de probióticos y prebióticos, enzimas digestivas, hipnosis, el ayuno intermitente y prolongado, el glucagón, terapia cognitiva y técnicas de meditación.
La ciencia todavía sigue experimentando e investigado en este sentido y, personalmente, creo que todavía nos falta mucha información.