Su coordinador en Cieza, Francisco Saorín, destaca entre estas enmiendas las que plantean reducir las ratios, eliminar las referencias a la libre elección de centro y las que sacan la religión de horario lectivo o establecen el carácter subsidiario de los conciertos
Crónicas de Siyâsa/Izquierda Unida
IU-Verdes de Cieza, a través de su coordinador Francisco Saorín ha mostrado su “especial satisfacción” por el contenido del medio centenar de enmiendas (54) registradas en el Congreso por Unidas Podemos de cara a la tramitación de la nueva Ley Educativa (LOMLOE). Estas enmiendas complementan el centenar de modificaciones al proyecto de ley del Gobierno registradas por este mismo grupo confederal conjuntamente con el PSOE. Además, responden a “nuestra posición programática y a los compromisos adquiridos con la comunidad educativa para defender una educación pública, laica, democrática e inclusiva”, apunta IU-Verdes.
IU-Verdes de Cieza muestran su confianza en que “Unidas Podemos seguirá en el trámite parlamentario que resta su negociación con el PSOE para que estas propuestas sean finalmente aceptadas mayoritariamente en la Cámara”, porque “se debe avanzar más para mejorar el texto de la LOMLOE que, sin duda, tiene aspectos positivos, empezando por la derogación de la nefasta LOMCE del PP”.
Sobre el contenido de las enmiendas registradas por Unidas Podemos, Saorín ha destacado “la eliminación de las referencias a la libre elección de centro como supuesto ‘derecho’ y/o como criterio para la escolarización y planificación de la red de centros; asegurar la suficiencia de la red pública de centros, mediante su extensión progresiva, para garantizar el mencionado derecho de todas y todos a la educación en condiciones de igualdad, que es lo que se desprende del artículo 27 de la CE; y garantizar suelo público solo para la construcción de centros públicos; así como establecer el carácter subsidiario de los conciertos y limitarlos, en su caso, a las enseñanzas obligatorias”.
Asimismo, “y hasta tanto no se deroguen los acuerdos con la Iglesia católica y otras confesiones, se debe sacar la religión del horario lectivo; se debe contemplar la elección democrática de dirección de centros por el Consejo Escolar y una composición más equilibrada y democrática del mismo; y establecer un máximo de 20 alumnos por aula en enseñanzas obligatorias y de 25 en post obligatorias, mientras que en Educación Infantil se aplicarán las ratios de referencia recomendadas por la red de atención a la infancia de la Comisión Europea, que son menores. Todo ello, unido a comisiones de escolarización permanentes, para evitar una escolarización ‘a la carta’ por parte de los centros (especialmente los concertados)”.
En las enmiendas, también se exige la coeducación como principio educativo y de escolarización en todos los centros, etapas y aulas; se plantea la creación del cuerpo unificado de profesorado; y se apuesta por eliminar la prueba generalizada de acceso a estudios superiores, contemplándose la existencia de algún tipo de prueba específica y selectiva cuando no haya plazas públicas suficientes para atender todas las solicitudes que se presenten en determinadas carreras.
Por último, “se pretende eliminar la repetición en Primaria y reforzar su carácter excepcional en ESO, dotando de refuerzos y apoyos; sustituir evaluaciones censales (a todo el alumnado) por muestrales (a una muestra significativa) en Primaria y ESO, ya que para hacer un diagnóstico del funcionamiento del sistema educativo que permita mejorarlo no son precisas ni convenientes las evaluaciones a todo el alumnado de determinado nivel, que ya se realizan por su profesorado, sino a muestras significativas; y se pretende garantizar la equiparación en inversión educativa con la media PIB de países de la Unión Europea en el periodo de aplicación de la ley”.