El numeroso público asistente completó el aforo del Museo de Siyâsa
Crónicas de Siyâsa
El pasado viernes, el Museo de Siyâsa fue el escenario de la presentación de El Violín, la ópera prima de José Antonio Vergara Parra. El acto congregó a un numeroso público, que completó el aforo dispuesto en el museo, expectante por averiguar, en primera persona, los detalles de la obra.
Joaquín Salmerón Juan, director del Museo de Siyâsa, realizó la introducción de la obra y Javier Gómez Bueno, director de Crónicas de Siyâsa, llevó a cabo la presentación.
Javier Gómez destacó que “la pluma y el ingenio de José Antonio para crear una atractiva y apasionante trama literaria es digna de admirar, puesto que en el libro “se reflejan todas sus pasiones y disputas vitales, las de un alma en constante lucha por hacer el bien, a pesar de las imperfecciones humanas”. De hecho, “el protagonista de la novela podría ser su alter ego: un hombre sumido en un mar de dudas ante los problemas que nos depara la vida, pero infatigable ante, ellos debido a la pureza de sus creencias y principios. En esta obra, el protagonista no es ningún tipo de héroe o superhombre. En realidad, es una persona en la que todos nos podríamos ver reflejados en nuestro día a día. Es uno de los millones de héroes anónimos que, siendo consciente de sus flaquezas, lucha y persevera en la creencia de que sus motivaciones son justas. Y, además, se siente arropado, en los momentos de tormenta, por una fe que le transmite el valor para continuar”.
Por su parte, José Antonio Vergara Parra puso reveló que “cuando me propuse escribir esta novela, me fijé un objetivo primordial que, no por obvio, ha de ser silenciado: el gozo debía presidir tanto al proceso creativo como la eventual lectura. En un mundo lleno de urgencias, servidumbres y pesares, la cultura debe erigirse en un radiante y fértil descanso. Para quienes, gentilmente, compren y lean mi novela, sólo les deseo que disfruten tanto como yo lo hice escribiéndola. Mi obra es ligera de equipaje, pues huyo de explanaciones excesivas que pudieran abatir al lector. Debido a ello, los hechos se suceden con rapidez, sin más prolegómenos que los estrictamente necesarios”
Finalmente, esta es una espléndida obra literaria, llena de pasión, que, sin duda, cautivará al lector.