Sol y sombras
Sábado, 3 de mayo
Días después de que haya vuelto la luz, siguen planeando demasiadas sombras. Red Eléctrica niega un ciberataque o fallo propio; el Gobierno se resiste a descartar nada y apela a una investigación externa; el PP aprovecha la ocasión para seguir cuestionando el Pacto Verde… El caso es que los cinco segundos que sumieron a España en el colapso están resultando tan enigmáticos como las horas que pasó Mazón en el Ventorro. La confusión está servida, y propiciando, no es casualidad, el recrudecimiento de la batalla ideológica entre renovables y nucleares. “La energía nuclear también cayó, no fue más resiliente”, zanjó Sánchez. Nos habíamos “olvidado” de las centrales nucleares, cuyas vidas no deberían alargarse más allá de 2035, según los defensores de la energía limpia. Sabíamos que estaban ahí, pero no las veíamos. Con el “gran apagón”, sus lobbies las vuelven a sacar a la luz para reivindicarlas. Frente al codicioso y siniestro Montgomery Burns de “Los Simpson”, tal vez haya que desempolvar la pegatina con el sol radiante y sonriente de ¿Nuclear? No gracias de nuestra juventud.
En la Valencia de Mazón
Lunes, 5 de mayo
Marine Le Pen siempre fustigó el laxismo, según ella, de la justicia francesa. Y no solo para los ladrones de gallinas. Pedía incluso, en 2013, la inelegibilidad de por vida para cualquier condenado por malversación de fondos públicos. Ahora que es ella la inhabilitada, no de por vida, sino para cinco años, tras ser declarada culpable de haber malversado 4,1 millones de euros, muda de piel y se declara víctima de una “justicia politizada”. En su ayuda ha acudido lo más granado de la ultraderecha mundial. El húngaro Viktor Orbán, nuestro Abascal, el magnate Elon Musk, el propio Trump, incluso Vladimir Putin, entre otros, que vienen a decir que “cuando la izquierda no puede ganar las elecciones, hace uso del sistema jurídico para encarcelar a sus oponentes”. En esa misma línea, el Aznar del 11M, del Prestige y de la corrupción (12 de los 14 ministros de uno de sus gobiernos fueron imputados, encarcelados o implicados en asuntos judiciales) ha pedido a Bruselas que “asegure” el Estado de derecho en España. En la Valencia de Mazón, para más inri.
Hambre viva
Jueves, 8 de mayo
El pasado sábado estuve por primera vez en Cañadas de San Pedro, una hermosa pedanía murciana enclavada entre sierras, huerta y mar; y tierra del mítico Antonete Gálvez. Presentaba mi amigo y profesor, Juan González, su libro Cabezo de la Plata Histórico, con prólogo de Pascual Vera. Allí pasó Juan sus primeros años, de allí procede su familia y allí fue su padre alcalde en los tiempos de esperanza de la República. De su amor por aquella patria de la infancia y aquellos tiempos puedo dar fe. Desde que lo conozco, siempre he visto cómo le brillan los ojos cuando los evoca. Decenas de historias, crónicas o anécdotas, ilustradas con fotografías y documentos antiguos, brotan de esta magnífica obra. Me quedaré con una por si les apetece “abrir boca”. La que le da nombre a la cuesta de Hambreviva, cuyo origen procede de los tiempos de escasez. Esa misma hambre viva, aunque en otro contexto, que yo siento por devorar las páginas de este libro, y la que tal vez deberíamos sentir todos por nuestra historia.