El Museo de Siyâsa acogió el coloquio de Pascual Vázquez Gómez, el maestro ciezano que encumbró la localidad en materia de cine juvenil
Miriam Salinas Guirao
El 4 de junio, el Museo de Siyâsa se llenaba para recibir las imágenes antiguas, soporte de otra época, que filmó el maestro Pascual Vázquez Gómez. Él nació en Cieza en 1942 y los primeros años los pasó en el campo, en los Prados, donde aprendió a leer y a escribir. En 1957 se aventuraba a estudiar bachillerato en la academia de Manuel Avellaneda, allí también estudió magisterio y preparó las oposiciones. Pascual, ahora, activo y alegre, rememora su vida con el mismo mimo que le ponía a sus películas. Quedó segundo de la oposición en 1964, y cinco años después daría con su destino definitivo: el Colegio Cristo del Consuelo, que vio los años de aprendizaje y creación de este maestro que “no tenía vocación”, pero que pasó sus mejores horas con sus alumnos fuera de las aulas. En los 33 años que estuvo en el colegio, que lo vio forjarse, desarrolló diversas actividades extraescolares, aunque su pasión era el cine. Realizó cine Súper 8 con el alumnado, obteniendo reconocidos premios de prestigio, y como explicó Joaquín Salmerón, director del Museo de Siyâsa, en la presentación de la charla: “No solo eran buenos porque fueran trabajos bien hechos, es que recibió galardones que ratificaban su calidad”. Tanto es así que Televisión Española en programas como Revista de Cine, Informativo nosotros, Pista libre y El plumier, reconocieron su labor.
En el coloquio revivieron las cintas: ‘Futuribles’ (1980), que obtuvo el segundo premio en el Concurso de Cine en Súper 8 del XIX Certamen Internacional de Cine para la Infancia y la Juventud de Gijón en 1891 y el Gran Permio en el Certamen Internacional X Musa, máximo galardón otorgado por el Centro Internacional de Cine para la Infancia y la Juventud de la UNESCO, en el mismo año; “S” (1980), ganadora del primer premio en el apartado de Imagen Real y también del Jurado Infantil y del Gran Premio del Jurado Internacional X Musa 1981; y ‘Porque…ya soy un hombre’ (1982), seleccionada para representar a España en el Certamen Internacional X Musa en París, 1982 y Premio de Interpretación al actor principal, Libanio da Silva en las XV Sesiones de Cine Amateur de Cuenca 1986. Y no fueron las únicas cintas, el material guardado con cariño pudo visionarse durante todo el acto.
En la sala se dieron cita alumnos, amigos y familiares que exaltaban la emoción al contemplan las cintas de vídeo que forman parte de su propia historia, tanto como de la de Cieza.