Los esparteros no fueron capaces de desplegar su juego en su visita a ciudad portuaria
Crónicas de Siyâsa/Paco Sarabia/L.O.
No hubo goles, tampoco muchas ocasiones, y no se vio en ningún momento la diferencia de puntos que refleja la clasificación entre ambos conjuntos. Cartagena B y Cieza sumaron un punto en un choque que terminó 0-0 y la sensación de que el empate fue justo.
El Cartagena B ha crecido con el paso de la temporada y ante el líder de la categoría se mostró muy confiado y con las ideas muy claras. Estuvo más cerca que su rival del gol, pero le faltó acierto en los metros finales. En el primer tiempo, nada más comenzar el partido, consiguió ver portería, pero Joe James estaba en posición antirreglamentaria cuando pudo superar a Simón Ballester. El cuadro dirigido por Pepe Aguilar se mostraba con desparpajo con balón, pero la gran mejoría que ha mostrado respecto al inicio de liga es que, sin el esférico, defendió muy bien y no dejó estar cómodo al Cieza en ningún momento.
El cuadro espartero, que con este empate ve como el Molinense se le acerca y ya depende de sí mismo para ser líder, buscaba en las bandas a Samu y Raúl Botía y a partir de ahí, intentaba conectar con un Florian que fue más una isla que otra cosa en este partido. El otro atacante, Luismi Bueno, fue el que tuvo la mejor ocasión del primer periodo, pero Nono despejó a córner su lanzamiento.
Tras la reanudación, el partido se abrió más y aparecieron más espacios. El Cieza, por mediación de Nico Díaz, tuvo una gran ocasión para poder adelantarse en el marcador, pero lo cierto es que, por número de acercamientos, estuvo más cerca del gol el filial cartagenero.
Caye en dos acercamientos claros, Ayman, nada más entrar, y Asensio, cuando el partido ya se acababa, estuvieron rondando el tanto, pero la falta de puntería penalizó a un cuadro albinegro que sigue todavía lejos de la zona de ascenso.
Ranko Despotovic se mostró contrariado tras el partido, porque percibe que la voracidad que tuvieron sus jugadores en las primeras jornadas a su cargo ahora no la nota. Lo cierto es que los rivales también juegan y la sensación es que Pepe Aguilar estudió bien al conjunto espartero y supo cómo frenarlo. No apareció, como estaba haciéndolo, Sergio Camacho y Florian no tuvo ninguna oportunidad franca para marcar.