Editorial

LA SOLIDARIDAD CIEZANA CON LOS AFECTADOS POR LA DANA

La terrible tragedia que asoló Valencia y Castilla-La Mancha, que padecieron la peor DANA de este siglo, provocó tristeza, amargura y rabia en todo el territorio nacional. Ha sido una catástrofe de gran magnitud que, al principio, dejó en estado de shock a la sociedad española.

Sin embargo, los españoles y las españolas, después del mazazo inicial, demostraron su carácter solidario e indomable ante las adversidades y dejaron patente la pasta de la que están hechos y hechas. Sintieron la necesidad de ayudar a sus hermanos y pusieron todo su empeño en ello; porque el pueblo siempre salva al pueblo.

La nefasta gestión del Gobierno de la Comunidad Valenciana y del Gobierno de España, más preocupados de los réditos políticos que de las personas, espoleó, todavía más, la acción ciudadana.

En este sentido, la sociedad ciezana, como cabía esperar, también se ha solidarizado con los afectados por esta tragedia. Desde Cieza, en seguida, se pusieron en marcha los mecanismos necesarios para canalizar la ayuda imprescindible (alimentos y bienes de primera necesidad) demandada. Las primeras ayudas ya están en la zona afectada y las próximas también están en marcha. Tenemos constancia de que, además de las vías oficiales, están partiendo, rumbo a Valencia, furgonetas de particulares con más alimentos (donados a través de las redes sociales y del “boca a boca”) para paliar esta lamentable situación.

Por todo ello, nos tenemos que enorgullecer del carácter solidario de la sociedad ciezana, que nunca deja atrás a los suyos. Esto supone un ejemplo que evidencia que el pueblo ciezano y el español tienen unos increíbles valores y que no se merecen la mezquindad de sus representantes, quienes deben poner los pies en el suelo y darse un baño de realidad. Sobre la conciencia de la clase política española (si acaso la tiene) recaerá la responsabilidad de tanto dolor.