Editorial

LAS HELADAS DE CIEZA Y EL LAS CARENCIAS DEL HOSPITAL DE LA VEGA LORENZO GUIRAO

Las heladas han vuelto a hicieron acto de presencia en Cieza la semana pasada. Un hecho que suele suceder en enero en el municipio, pero con el agravante de que las altas temperaturas, para la época, de finales de diciembre y principios de enero había propiciado que gran parte de la fruta extratemprana (melocotón rojo y nectarina) tuviera abierta la flor del fruto.

Esta circunstancia ha traído como consecuencia que, en principio, la mitad de la cosecha de estas variedades se haya perdido. La fruta perdida supone entre un 2% y un 3% del total de la producción de fruta de hueso de la localidad, lo que significa que es un golpe a la agricultura relativo, pues la mayor parte de la producción todavía no ha florecido.

Sin embargo, la incertidumbre cundió entre los agricultores afectados y muchos de ellos pasaron las noches en vela intentando paliar los efectos de las heladas. Y esta incertidumbre se hace extensible al resto, ya que si se produjesen heladas en febrero (un hecho que no sería descabellado) sí que afectaría entonces a la mayoría de la producción local.

En este sentido, solo cabe confiar (ya que sería lo deseable) en que no se produzcan las mismas, porque la agricultura ciezana es el sustento de numerosas familias del municipio. Nuestros sufridos agricultores, además de luchar contra la competencia desleal de terceros países y sufrir las injusticias de los precios de mercado que ha provocado que en numerosas ocasiones hayan tenido que vender ‘a pérdidas’, están expuestos a los avatares climáticos. Deseamos que las pérdidas producidas por las inclemencias metereológicas se queden solo en estas que acaban de padecer. Por su propio bien y por el del conjunto de la sociedad y economía ciezanas.

Por otro lado, en el ámbito político-sanitario, en los presupuestos regionales, el Gobierno regional ha destinado apenas 95.000 euros de los más de 2 millones que serían necesarios para subsanar las carencias y falta de servicios del Hospital de la Vega Lorenzo Guirao de Cieza, tal y como vienen reclamando tanto la Plataforma Pro-Hospital de Cieza como el Gobierno municipal. Entre las quejas manifestadas se encuentran la falta de presupuesto para las ampliaciones de quirófanos, la ausencia del servicio de radiología durante las 24 horas, la habilitación de una unidad psiquiátrica, el refuerzo de las especialidades de neurología y rehabilitación, el incremento del número de turnos en la unidad de hemodiálisis y la reapertura del servicio de pediatría en urgencias, que fue eliminado durante la pandemia.

El Hospital de la Vega Lorenzo Guirao da cobertura sanitaria a 55.000 personas de Cieza, Abarán y Blanca. Un número de habitantes para nada desdeñable que merece ser tratado en iguales condiciones que el resto de murcianos. Por tanto, urge que la CARM, a la mayor brevedad, destine los recursos necesarios para garantizar el derecho a servicios sanitarios adecuados de esta población. Se da la circunstancia de que estas tres localidades tienen gobiernos de izquierdas. No sería de recibo que fueran “castigadas” por este motivo por parte del PP regional. Porque la política es la herramienta para servir al ciudadano y no para servir a intereses partidistas.

 

 

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