Editorial

LA DESESCALADA Y LAS AYUDAS PARA PALIAR EL COVID-19 EN CIEZA

Esta semana tenemos buenos noticias para los autónomos, las pymes y las familias necesitadas de Cieza que sufren los efectos económicos negativos que está produciendo la pandemia del Covid-19. El equipo de gobierno municipal ha dispuesto una partida de 550.000 euros, procedentes del remanente positivo de tesorería, a tal efecto. Es un importante balón de oxígeno en una situación tan delicada como es en la que nos vemos inmersos.

Estas ayudas se desglosan en 400.000 euros para pymes y autónomos y 150.000 para las familias más necesitadas. A esto se le debe unir la partida de 400.000 euros que ya destinó el Consistorio, procedente del superávit, y las ayudas que ha destinado el gobierno central.

Muchos autónomos, pequeñas empresas y familias están padeciendo las consecuencias económicas de una pandemia que les ha abocado al cierre temporal de sus negocios y al desempleo. Las ayudas que se ofrecen, a pesar de ser cuantiosas, no podrán paliar el perjuicio económico total que han sufrido, lógicamente. Pero puede servir para que el trance pueda ser más llevadero y que no tengan que “echar el cierre” definitivamente.

La propia pandemia y sus consecuencias han sido impredecibles, en la mayoría de los casos, para todos los gobiernos del mundo. Sin embargo, estas ayudas sociales contrastan con lo que anteriores gobiernos (nacionales, autonómicos y locales) ofrecieron como respuesta a la ciudadanía y al conjunto de los trabajadores en la última crisis de 2008: recortes y miseria. También contrasta con los recién aprobados presupuestos regionales, donde López Miras y sus acólitos han recortado en Sanidad (en plena pandemia del Covid-19) mientras el presidente se ha subido el sueldo en 3.000 euros anuales.

La desecalada ha comenzado. Otra buena noticia que puede servir para paliar la situación económica, ya que nos esperan unos meses especialmente duros en ese ámbito. Pero siempre hay que extremar la prudencia porque podemos volver a la “casilla de partida”. Si algo nos ha debido enseñar esta pandemia es su impredecibilidad.

A partir de ahora debemos demostrar que somos una sociedad responsable. Se deben cumplir estrictamente las medidas de distanciamiento social cada vez que se salga a la calle con los niños o a practicar deporte, por ejemplo, para ir cumpliendo las fases y que no se produzca un nuevo rebrote del coronavirus. Una actuación sin control, por parte de los propios ciudadanos que seremos los máximos responsables de nuestras actitudes, puede “echar por la borda” todo lo que se ha logrado hasta ahora con tantísimo esfuerzo. Así, por tanto, la concienciación de la ciudadanía y su respeto por las normas serán decisivas para que pronto podamos recuperar nuestras vidas. Se lo debemos al conjunto de la ciudadanía y a los miles de fallecidos por esta terrible pandemia. Está en nuestras manos.

 

 

Escribir un comentario