Editorial

EL BROTE DE COVID-19 EN CIEZA

Hace dos semanas la alerta sobre un posible brote de covid-19 en la localidad quedó en una falsa alarma. Sin embargo, ahora es real. La semana pasada se detectaron ocho casos positivos en coronavirus, que se unen a los tres ya existentes, y hacen un total de 11.

El dato positivo que podemos extraer de este suceso es el que nos apunta el doctor Carlos Arenas, gerente del Área de Salud IX al que pertenece el municipio: se han realizado casi un centenar de pruebas PCR entre los contactos íntimos de los contagiados el pasado domingo y, por el momento, solo se ha dado otro positivo más. Esto quiere decir, según argumenta el doctor, que, a pesar de la impredecibilidad de este virus todavía desconocido, puede ser que el brote esté controlado. Esperemos que así sea y no tengamos que pasar por el mismo trance que está sufriendo Totana, que ha vuelto a la Fase 1.

Por ello, volvemos a hacer hincapié en lo que siempre hemos venido advirtiendo y que también ha declarado el doctor Arenas: hay que seguir extremando las medidas de higiene y el distanciamiento social, principalmente en las reuniones familiares y en las salidas de ocio. Si sufrimos un brote importante en la localidad que nos haga retroceder, las consecuencias, tanto sanitarias como económicas, podrían ser desastrosas. Se avecinan tiempos duros en el ámbito económico, producto de la pandemia y sus consecuencias, a pesar de los datos positivos de empleo que arroja la EPA. Retroceder a la Fase 1 traería efectos muy negativos para nuestros comercios, establecimientos hosteleros y, por ende, para el conjunto de la ciudadanía de Cieza.

Ahora la responsabilidad es nuestra. Tenemos que seguir cumpliendo estrictamente las medidas sanitarias por el bien de nuestros familiares y amigos, en el ámbito sanitario, y por bien común, en el ámbito económico. Así pues, no desfallezcamos ni nos relajemos. Solamente todos juntos y unidos seremos capaces de vencer a este virus.

 

 

One thought on “Editorial

  1. Uno de Cieza

    Pues empecemos por multar a la gran cantidad de gente que va sin mascarilla o mal puesta. A decenas los cuento yo a diario. Que insolidaria es la gente.

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