Fue parado al sospechar la Guardia Civil de su actitud y en las pruebas de alcoholemia dio un resultado positivo de 0,73 y 0,75 miligramos de alcohol por litro de aire espirado
Crónicas de Siyâsa/Guardia Civil
La Guardia Civil de la Región de Murcia interceptó y detuvo, en Santomera, al conductor de un vehículo articulado de 40 toneladas por quintuplicar la tasa máxima de alcoholemia permitida para conductores profesionales.
Los hechos se produjeron mientras efectivos del Sector de Tráfico de la Benemérita se encontraban realizando un control de condiciones técnicas de vehículos con una unidad móvil de de Inspección Técnica de Vehículos (ITV) concertada con la Dirección General de Tráfico (DGT) en la carretera N-340 (Cádiz-Barcelona), a la altura de El Siscar-Santomera.
En el transcurso de una inspección sobre un camión articulado de 40 toneladas de masa máxima autorizada (MMA), los guardias civiles observaron cómo su conductor aparentaba un comportamiento extraño, lo que les llevó a sospechar que pudiera haber tomado sustancias prohibidas e incompatibles con la conducción de vehículos.
Identificado el conductor del vehículo articulado –un varón, español y de 35 años– fue sometido a las preceptivas pruebas de alcoholemia, en las que arrojó un resultado positivo de 0,73 y 0,75 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, en sendas pruebas reglamentarias, quintuplicando, por tanto, la tasa máxima permitida, que en el caso de conductores profesionales es de 0,15 mg./litro.
Por este motivo, el camionero, que realizaba un transporte de chatarra desde Santomera hasta Molina de Segura, fue detenido como presunto autor de delito de conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, al superar con creces las tasas establecidas, siendo puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Murcia para la celebración del correspondiente juicio rápido.
Debido a la elevada tasa de alcoholemia, el vehículo quedó inmovilizado en el lugar, conocido como báscula de El Siscar, dada la peligrosidad que comporta la circulación de un vehículo de gran tonelaje en estas condiciones y la merma de reflejos que la influencia de alcohol supone, hasta que la empresa titular del mismo dispuso que se trasladara un conductor alternativo que, sometido a las pruebas preceptivas, tras verificar que reunía las condiciones reglamentarias adecuadas para hacerlo, pudo continuar el desplazamiento proyectado.
Además, al arrestado se le formularon cuatro denuncias administrativas, dos de ellas ante la Dirección General de Transportes, Costas y Puertos de la Región de Murcia, por irregularidades en materia de tacógrafos que suponen sendas multas de 1.001 euros y las otras dos ante la Jefatura Provincial de Tráfico por infracciones a los Reglamentos Generales de Conductores y de Vehículos, respectivamente, que llevan aparejadas multas de 200 euros cada una de ellas.
Se da la circunstancia de que este conductor ya había sido detenido anteriormente por la Guardia Civil en 2013 por conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, en aquel caso triplicaba la tasa máxima permitida. Asimismo, en su historial delictivo a este conductor le constan dos suspensiones temporales de permiso de conducir dictadas por sendos Juzgados de lo Penal de Murcia durante los años 2013 y 2014, respectivamente.
El delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, con tasas superiores a 0,60 miligramos/litro, se encuentra recogido en el artículo 379 del Código Penal y puede ser castigado alternativamente con penas de prisión de 3 a 6 meses, multa de 6 a 12 meses, o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y en cualquier caso con privación de derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a 1 y hasta 4 años.