Al descubierto las joyas rupestres del Barranco de los Grajos

Con motivo del 55º aniversario de su descubrimiento se ha realizado una visita guiada por el mismo y Antonio Moya, edil de Turismo, adelanta que tienen pensado realizar un Centro de Interpretación del Arte Ruprestre

Javier Gómez

Ayer por la mañana se llevó a cabo una visita guida por Joaquín Salmerón, director del Museo de Siyâsa, a las cuevas del Barranco de los Grajos como conmemoración del 55º aniversario de su descubrimiento, en 1962, por parte del Grupo GECA de la OJE, compuesto por Eduardo Pascual López, Juan Salmerón Llamas, Juan Salmerón Egea, Manuel Dato Buitrago, Francisco Sánchez Villa, Francisco Salmerón Jiménez y Antonio Salmerón Leante. A la misma acudieron también el edil de Turismo, Antonio Moya, y la concejala de Museos, Pilar Martínez.

Moya quiso destacar la importancia y especialidad del día pues «nos encontramos ante las primeras pinturas rupestres descubiertas en Cieza, alrededor de 50 figuras y que tuvo su repercusión en la época en medios como ABC y Le Figaro, en Francia. Todo ello ha conseguido que esta joya arqueológica haya colocado a Cieza en los libros de la Prehistoria». Además, agradeció el hallazgo a los miembros del grupo, representados en la visita por Juan Salmerón Llamas y Francisco Salmerón Jiménez y destacó la labor de la Guardia Civil y de los agentes medioambientales en la preservación del lugar.

Asimismo, Joaquín Samerón lamentó el deterioro que ha sufrido el lugar debido a los actos vandálicos desde su descubrimiento, incluso después de haberse enrejado el lugar. Pero matizó que «nos encontramos en un lugar único». Salmerón Juan mostró a los asistentes las más de 50 figuras las encontradas, entre las que destaca un panel principal en el que hombres, mujeres, ciervos, cabras y jabalíes, entre otros cuadrúpedos, que se fundían en la escena de danza más compleja del Arte Rupestre de Europa Occidental. También destacó que el lugar era un santuario de la civilización Neolítica, con una antigüedad de 8.000 años, y no un sitio de hábitat de estos hombres donde se observan los trazos de cuatro artistas diferentes. «En el se ven representados figuras danzantes que, debido a la plasmación de penes erectos por parte de los hombres, nos hace pensar que estamos ante algún tipo de tributo a la fertilidad». Y como matiz especial explicó que «existen posteriores pinturas, humanas y de cuadrúpedos, realizadas tanto en la época romana como en el siglo XV y XVI, ya que este era un sitio típico de abrigo».

Siguiendo los orígenes del descubrimiento, en 1968 el catedrático de Arqueología de la Universidad de de Zaragoza presentaría un avance del descubrimiento de el Congreso Internacional de Valcamónica (Italia) y en 1969 publicaría un libro en su universidad llamado ‘Las cuevas de los Grajos y sus pinturas rupestres. Cieza, Murcia’.

Posteriormente, en 1972 Mikel Walter realizaría excavaciones arqueológicas en el Abrigo II en el que participaron los entonces jóvenes ciezanos Francisco Salmerón Giménez y Pascual Salmerón Egea, entre otros. Los resultados de aquellas excavaciones se publicaron por su autor en una revista de estudios antropológicos de Australia, en 1977, y los materiales hallados se encuentran desde 1972 en los fondos del Museo Arqueológico Nacional de Madrid. Asimismo, otros materiales hallados en excavaciones no científicas y prospecciones se encuentran hoy en el Museo de Siyâsa.

Finalmente, Antonio Moya, concejal de Turismo, adelantó que para finales de este mes está previsto presentar un proyecto para llevar a cabo un Centro de Interpretación Ruprestre, donde se dedicaría la primera planta a los motivos arqueológicos de Cieza y la segunda a los regionales. Según fuentes consistoriales, aunque todavía no está decidido, se piensa instalar en el antiguo Museo Arqueológico de Cieza, situado en la calle Cadenas.

 

 

 

Escribir un comentario